Murió la pareja de siameses más ancianos del mundo; estaban unidos por el cráneo
De última hora. Los siameses que se habían considerado hasta ahora como los más longevos en todo el mundo, han muerto. Lori y George la pareja de siameses murieron a los 62 años de edad en un hospital de Pensilvania, en Estados Unidos. Te contamos su historia.
Te recomendamos: ¿Cómo saber que tomé mucho café? 12 señalas de exceso
Murió la pareja de siameses más ancianos del mundo
Según información de la funeraria Leibensperger Funeral Homes el fallecimiento se produjo el pasado 7 de abril.
Los gemelos, catalogados por el Libro Guinness de los Récords como los siameses vivos de mayor edad:
“Los médicos no les dieron más de 30 años de vida”.
Lori y George siguieron carreras, intereses y relaciones separadas durante su vida y superaron las expectativas médicas al superar la edad más “vieja” hasta ahora en siameses.
Al cumplir 50 años, Lori dijo lo siguiente, según información en The Philadelphia Inquirer:
“Cuando nacimos, los médicos no pensaban que llegaríamos a los 30, pero les demostramos que estaban equivocados”.
¿Qué son los siameses craneópagos ? Esto explican los expertos
Los siameses son gemelos unidos, es decir, dos bebés que nacen conectados físicamente y según información en Mayo Clinic, los gemelos unidos se desarrollan cuando un embrión temprano se separa parcialmente para formar dos individuos:
“Si bien dos bebés se desarrollarán a partir de este embrión, permanecerán conectados físicamente, generalmente por el pecho, el abdomen o la pelvis”.
Los gemelos unidos también pueden compartir uno o más órganos internos.
Algunos gemelos unidos que sobreviven pueden ser separados quirúrgicamente:
“El éxito de la cirugía depende del lugar donde están unidos los gemelos y de cuántos y qué órganos comparten. También, depende de la experiencia y la habilidad del equipo quirúrgico”.
Los gemelos unidos suelen clasificarse según el punto en donde se unen. En ocasiones, comparten órganos u otras partes del cuerpo:
“Cada par de gemelos unidos es único”.
De los gemelos unidos por el cráneo, como el caso de Lori y George, los especialistas revelan lo siguiente:
“Los gemelos craneópagos están unidos en la parte posterior, superior o lateral de la cabeza, pero no en la cara. Este tipo de gemelos comparten una parte del cráneo. Si bien suelen tener cerebros separados, pueden compartir algo de tejido cerebral”.
La historia de Lori y George, los siameses con récord Guinness
Los gemelos, nacidos el 18 de septiembre de 1961 en West Reading, Pennsylvania.
Los siameses tenían cerebros totalmente distintos, aunque se encontraban unidos por el cráneo, una zona delicada comparado con otros siameses que suelen estar unidos por el pecho, la espalda o la pelvis.
Lori llevaba a George, que tenía espina bífida y era 4 pulgadas menos de estatura, en un taburete con ruedas adaptable.
Pese a que cada uno tenía que ir a donde iba el otro, era muy importante para ambos vivir lo más independientemente posible:
“Ambos se graduaron de una escuela secundaria pública y tomaron clases universitarias. George estuvo allí durante seis años mientras Lori trabajaba en la lavandería de un hospital. Lori renunció al trabajo en 1996 para que su hermano pudiera lanzar su carrera en la música country”.
The Philadelphia Inquirer informó además que Lori estuvo comprometida para casarse, pero que su prometido murió en un accidente automovilístico:
“Cuando tenía citas, George traía libros para leer. El hecho de que no podamos levantarnos y alejarnos uno de otro no significa que no podamos estar solos con otras personas o con nosotros mismos. Las personas unidas pueden tener una vida muy privada”.
Vivían en un piso, donde cada uno tenía su propia habitación y dormían variadamente en cada una.
Te recomendamos: Mucho cansancio puede ser señal de estas enfermedades
Finalmente esta pareja de siameses consiguieron compaginar sus carreras y en ningún momento se plantearon someterse a una operación quirúrgica, una idea que los dos rechazaban, como informaron en su documental:
“¿Nos separaríamos? Absolutamente no. Mi teoría es: ¿por qué arreglar lo que no está roto?”
Con información de: Univisión
Fotografía: La Vanguardia