Salud
Vivir cerca del agua reduce riesgo de angustia psicológica grave: estudio
El agua puede hacer más que solo hidratarte y hacer funcionar tu cuerpo. También te puede ayudar con la angustia psicológica grave.
Sí, así como lo escuchas. De acuerdo con investigadores de la Washington State University, uno de los beneficios del agua es el cuidado de la salud mental.
Los expertos señalan que vivir cerca de un cuerpo de agua como lagos, el mar, cenotes o fuente, además de hacerlo en contacto con la naturaleza, puede reducir el riesgo de angustia psicológica grave, que es el causante de demencia.
La angustia es una emoción, sentimiento, pensamiento, comportamiento o condición desagradables para el que lo presenta. En palabras de la Sociedad Americana del Cáncer, puede repercutir la forma en la que una persona se siente, actúa o razona.
El trabajo de la Washington State University destaca que las personas que viven cerca de cuerpos de agua o en la naturaleza muestran una mejor salud mental que las que no radican en estos sitios.
¿Evitar la angustia psicológica grave es uno de los beneficios del agua? Al parecer sí.
Los autores analizaron a 42 mil 980 adultos mayores que vivían en zonas urbanas de Washington y percibieron que pasar más tiempo al aire libre puede ayudar a prevenir padecimientos psicológicos como la angustia psicológica grave.
Encontraron que vivir más cerca de ambientes verdes y azules (o naturaleza y cuerpos de agua) puede disminuir las probabilidades de sufrir malestar psicológico grave.
Su definición de angustia psicológica cualquier padecimiento de salud mental que necesite tratamiento o tenga un impacto moderado a grave en la capacidad de una persona para desempeñar sus actividades cotidianas.
“Tenemos la esperanza de que nuestra investigación lleve a otros estudios sobre la manera en la que funcionan los beneficios del agua y si el estar cerca del agua puede retrasar o prevenir el deterioro cognitivo leve y la demencia”, mencionó el autor principal.
Su investigación fue presentada en la reunión anual número 75 de la Academia Estadounidense de Neurología.